Número 1.2 (24-04-2008)
La ausencia de la lectura,
breve reflexión sobre el ánimo lector
" Realmente ¿es la falta del hábito lector en nuestro país un problema dantesco que no encuentre solución? "
¿Quién tiene la culpa? Yo no lo sé, pero si puedo denunciar a aquellos padres, maestros y profesores que no leen y mucho menos tienen la osadía de mostrar a sus hijos y alumnos, respectivamente, libros que lean o estén leyendo. Aunque claro, no sólo de volúmenes escritos vive el hombre. Recordemos que en nuestro amplio panorama literario actual existen los cómics, blogs, revistas de todo tipo, prensa de todos los colores ideológicos…hasta en los metros de las grandes ciudades existen pequeños carteles que rezan algunos versos de Juan Ramón Jiménez o fragmentos de novelas de Ángeles Caso.
Ustedes no hagan responsables del problema, la ausencia de lectura, al gobierno o la sociedad. Esos son culpables que están muy manoseados y han caído en los tópicos del discurso del saber común del pueblo. Comiencen preguntándose si no son parte de esta tragedia griega. ¡Irresponsables! Solo tendrían que leer una hora a la semana en voz alta ante sus alumnos, y las semillas ya se irían plantando. De allí algo saldrá.
Anímense a romper con el orden de secuenciación de las programaciones, que programan y luego no llevan a cabo, y atraigan al niño a esos libros “prohibidos” por la sociedad actual, me refiero a los clásicos. Creen distensión en clase y se hará la luz de la extensión lectora; pero no olviden usar también tebeos, relatos cortos, cuentos, chistes, anécdotas, adivinanzas…
Si la empresa prospera enlacen con las nuevas tecnologías, con los encuentros reales con autores y realicen fructíferas visitas a las bibliotecas de la ciudad, alumnos y profesores conjuntamente en convivencia, no en coexistencia escolar obligatoria.
No existen métodos mágicos para que nuestros más jóvenes lean; tampoco existen unas características psicológicas o meramente cognitivas que expliquen el porqué del adolescente antilibresco fóbico estudiante de la ESO.
Para que nuestros hijos y alumnos lean es necesario un compromiso educativo lector: ellos leerán si nosotros leemos y enseñamos a amar los libros. Autoevaluemos nuestro rol de lectores ante los más benjamines y seamos responsables de nuestra conducta: si no cogemos un libro, más que dejarlo en la mesa como posavasos o pisapapeles de facturas, no esperemos que los que nos observan a diario, se apasionen por El Quijote.
Una nota para los educadores: al compromiso educativo lector, se debe añadir una buena propuesta metodológica que aúne los métodos tradicionales de lectura con las TIC. ¿Qué implica esto? Reciclaje académico y proceso de enseñanza aprendizaje para los docentes.
Por cierto, no he mencionado el Informe Pisa.
Revista realizada por el equipo y colaboradores de la editorial Ratón de Biblioteca ©2008. Maquetación y montaje: Pablo Herrero Coira ©; Escritos: Carmen María Sánchez Morillas ©.